Trabajo desde un enfoque de terapia integradora, combinando distintas corrientes —como la cognitivo-conductual, la humanista y la sistémica— para adaptarme a ti y a tu ritmo. Integro también una mirada desde el trauma y el apego, que me permite acompañarte con más profundidad y respeto por tu historia. No se trata solo de calmar lo que duele ahora, sino de comprender cómo tus experiencias han ido moldeando tu forma de sentir, de pensar y de vincularte. Si quieres saber más sobre cómo entiendo la terapia y qué me mueve, puedes verlo aquí.

En mi experiencia, el cambio es posible cuando te sientes acompañada de verdad. A través del vínculo terapéutico, irás ganando claridad, fuerza y herramientas para cuidarte mejor, tomar decisiones con más calma y construir relaciones más sanas. Se trata de reconectar contigo, con lo que de verdad importa y con la vida que deseas vivir.